Las llenadoras y cerradoras de JBT pueden marcar una diferencia tangible en la eficacia y eficiencia de las operaciones de los procesadores de alimentos y bebidas, pero los presupuestos no siempre alcanzan para cubrir el coste de la maquinaria nueva. El modelo "R" o "reconstruido " de JBT ofrece un medio para adquirir equipos JBT protegidos por la garantía, compuestos por componentes electrónicos nuevos en un bastidor existente, a un precio atractivo para las empresas pequeñas y medianas.
"Podemos compararlo con los fabricantes de automóviles que ofrecen una revisión completa cuando quieren volver a poner en circulación coches antiguos", dice Rex Pattyn, director de ventas de atención al cliente de JBT. "Esto es exactamente lo que hace JBT. Se trata de máquinas que recompramos a clientes que ya no las necesitan y -tras la revisión completa- podemos ofrecerlas a otros clientes, con el resultado de que éstos reciben una máquina casi nueva."
Soluciones estándar de la industria
Como explica Pattyn, el programa JBT Model R conserva los bastidores y algunas piezas originales de la llenadora y la cerradora, pero incorpora componentes y sistemas electrónicos totalmente nuevos y de última generación, descartando los elementos de desgaste. También se realiza una evaluación de riesgos de todas las piezas recicladas, y todo se actualiza según las normas vigentes antes de volver a instalarse en la llenadora o la cerradora.
"El modelo R significa 'Rebuilt' (reconstruido) y el precio de estas máquinas suele ser el de una máquina nueva menos aproximadamente un 30%", dice Pattyn. "El coste es menor que el de la fabricación de una máquina nueva porque el bastidor y las piezas críticas ya están ahí, mientras que todo el resto se sustituye.
"Los clientes obtienen una verdadera máquina JBT estándar de la industria completa con garantía a un precio muy atractivo. Esto ayuda a los clientes que quieren comprar una máquina JBT genuina pero no tienen el presupuesto disponible para comprar una nueva."
"No nos limitamos a limpiar una máquina y darle una nueva capa de pintura, sino que desmontamos por completo los componentes, limpiamos a fondo la maquinaria, la recubrimos y lo ponemos todo a la altura de los estándares actuales de la industria, por lo que se trata de un enfoque completamente diferente al de un comerciante normal de máquinas de segunda mano", añade Pattyn. "Se trata y se comprueba la calidad como si fuera un equipo nuevo".